Ya llevamos cuatro capítulos de Plutón Verbenero y creo que les he dado tres oportunidades de más. Pero sigo leyendo que la serie mejora, que estos capítulos son de adaptación y a mí me parece que estoy en el cuento de Pedro y el lobo, cuando llegue algo divertido no estaré allí. El problema principal es que no me hace gracia. Y lo peor es que lo supe desde los créditos
A modo de presentación una voz nos cuenta como está el futuro y que hay que buscarse otro planeta para colonizarlo, pasemos como bueno el chiste de Benidorn, y entonces suena la primera alarma: el presidente de la tierra Mckulay Kulkin III. Pero vamos a ver alma de cántaro, estamos en 2008, un chiste sobre Macaulay Culkin a estas alturas de la vida está más pasado que la pipa de un indio. La última noticia que tuve de él fue en la película Party Monster (2003) pero el resto del mundo no le ha visto el pelo desde el '94. El problema es que se sigue repitiendo con chistes sobre la memoria de los androides, si son Mac o PC, es decir, cosas que dejaron de hacer gracia el día que Bill Gates salió del garaje.

De momento no tienen claro si quieren hacer Enano Rojo o Star Trek, así que tenemos una sitcom estirada con escenas que parecen que no van a terminar nunca, diálogos que no dicen nada y que se prolongan durante interminables minutos. Si pueden decir algo con diez palabras prefieren usar treinta y mientras vemos como las tramas no tienen ningún sentido. Porque yo creo que estamos con el mismo problema que tiene George Lucas, ¿quién tiene los huevos de decirle a Alex de la Iglesia que ha escrito un capítulo de mierda?
De los personajes solo me hacen gracia Roswell y Querejeta, pero es que Carlos Areces me haría gracia hasta presentando el telediario. El resto me parecen pesados y las videoconferencias de Valladares con quién sea para poner la publicidad de Orange son de lo peor, por lo menos los de El internado son graciosos de puro cutre.

El título del comentario viene a cargo del personaje de Lorna, no se si Carolina Bang es tan mala actriz como parece en la serie, pero el casting para su personaje parece la respuesta al chiste de que secretaria eligieron para el trabajo: a la rubia de las tetas grandes.
