08 mayo 2007

¡Trata de arrancarlo!

Cuando alguien se inventa una serie de acción llega el momento crítico de decidir cómo diablos se moverá el protagonista de acá para allá. Yo recomiendo las cuatro ruedas para el mundo del motor porque todo lo demás es un engorro que hará que la serie no prospere. Con un buen coche hasta tonterías como El sheriff chiflado pueden llegar a 150 capítulos.

Salto número 4.892

El halcón callejero tenía a una moto de co-protagonista. Supongo que vista hoy la serie será cutre porque yo ya la recuerdo así. La moto tiene el problema de que al prota no se le ve la cara. Además si persigue a alguien y tiene que salir corriendo, ha de poner la pata de cabra que no lo veo yo muy televisivo. Para liar más las cosas si el prota sale por piernas, se tendrá que quitar el casco para no parecer la Hormiga Atómica. Creo recordar que el prota estaba cojo, con lo cuál la serie era un desatre y comprensiblemente no podía durar más de una temporada.

Sin casco: -2 puntos de carnet

¿Cómo solucionar lo anterior? Fácil, con bicis y tías buenas. Los de Pacific Blue tiran la bici en cualquier lado sin problemas y como llevan una chichonera la cosa no queda tan ridícula. La idea tampoco es como para volverse loco, es como hacer Bonanza pero cambiando los caballos por aluminio.

Si se te ocurre prolongar una peli de éxito como El trueno azul en la tele la estás cagando otra vez. ¿Cuánto juego da este helicóptero? Pues volar y disparar con la ametralladora gigante. Pero que si dónde aparco, quítate el casco, que esto tarda en arrancar un huevo... Resultado: una temporada.

¿El tamaño importa?

Retrocediendo un poco más llegamos a Los cuentos del mono de oro. Me gustaba mucho pero que el prota tenga un hidroavión no es la mejor opción. Si ya es jodido con un helicóptero, aquí encima necesitas agua. Pero a mí me tenían ganado porque yo siempre quise un hidroavión para mis garbeos por la tierra y un Halcón milenario para las vacaciones en Endor o la semana blanca en Hoth. También tuvo una temporada, pero supongo que ya se sabía de inicio, destruir los decorados con una erupción volcánico no creo que esté en el abecé del guionista de series.


Sin embargo, con cuatro ruedas no necesitas cascos, no cantarán demasiado los dobles, lo dejas donde quieras... Si eres Michael Knight vacilas con las chatis y si se tercia, Kitt conduce mientras haces guarrerías en el asiento trasero. ¡Si hasta tintaba los cristales!


Pero el caso más impactante es la furgo de El equipo A. Es increíble como la industria automovilística consiguió meter en el subsconsciente colectivo que una fregoneta tuneada molaba. Gracias a eso la gente es capaz de conducir un monovolumen sin pensar que lleva un trasto.


Amigo, en el maletero no llevas metralletas, es un carrito de bebé y unos pañales. Asúmelo.

5 comentarios:

SisterBoy dijo...

El trueno azul tenía un equipo de apooyo llamado El trueno rodante conducido por un negro calvo y un blanco gordo. Supongo que trataban de resolver ese problema del que hablabas. Que mala era

Deckard dijo...

¿El negro era calvo? A tanto no llego pero si que eran la guinda para terminar de matar la serie.

Se puede añadir que siempre tenían una excusa idiota para disarar esa tubo pequeño de precisión, que si un cable, que si unas esposas, que si abrir la cerveza...

¿A que te viste todos como yo?

SisterBoy dijo...

Toditos, el negro era calvo

Maria Del dijo...

La del mono de oro ni me suena, así sería de buena, y yo pensando que en mi niñez me tragué todo lo habido y por haber que nos ofrecían la 1ª y la 2ª cadena.
¿El del Halcón Callejero era cojo? Tampoco recuerdo eso.
Ya investigaré, ya
Un saludo

Deckard dijo...

Ya investigué. Se queda cojo y a cambio de colaborar le operan, pero sigue fingiendo ser cojo. Vamos que en House copian la cojera y la moto.